Hablemos de ti, hablemos de mi.
1ª parte
Te conocí, tal vez en el peor momento, (aunque más
tarde la cosa cambiaría) no provocaste absolutamente
nada en mi, me olvidé de ti, no recordaba ni como eras.
Pasó el tiempo, y como si el destino quisiera que tú y
yo volviéramos a vernos, nos volvimos a encontrar,
cruzamos palabras, si eso alguna que otra mirada,
quedamos en que al día siguiente no sabrías quien
era yo, (un juego por así decirlo) sin saber por qué
te acordaste al verme.
2ª parte
Pasaron dos semanas o así, y quedé con unas amigas,
por casualidades de la vida una de ellas era amiga tuya,
la llamaste para verla, apareciste y empezamos a hablar,
no eras alguien que me llamara mucho la atención, más
bien en esa época estaba intentaba llamarle la atención
a un chaval, el cual estaba pillado, no sé por qué, pero
me transmitías confianza, me transmitías cosas que otras
personas no, era algo raro.
Pasaba el tiempo, y más confianza había, empecé a
plantearme eso de ganarte, no como si fueras un premio
(que también), sino ganarme tu confianza, tu cariño,
no sé si me explico. Cada vez que te veía pensaba en
cómo todavía había personas que rechazaban a alguien
como tú, alguien tan askchdhbca, y que tenía que conseguir
que te fijaras lo más mínimo en mi, era un tanto difícil, lo
veía casi imposible, (más que imposible, improbable) así
que tenía que saber cómo mover las fichas, cómo jugar,
como si fuera una partida de ajedrez, y si fallaba.. jaque mate,
como una partida de la oca, de oca en oca, y si gano beso tu
boca porque me toca. La cosa estaba difícil, y eso en realidad era
lo que me gustaba, que me costara, que hubiera algo que me
sacara de toda la mierda en la que pensaba continuamente,
porque en ese tiempo, lo estaba pasando mal, y lo único que
me hacia olvidar, era intentar llevarte a mi terreno.
3ª parte
Un día, después de varias semanas hablando, de risas, sonrisas, cruce
de miradas, hubo un cierto acercamiento, yo dudaba de mis movimientos
porque tú no eras coherente en ellos, me tratabas como alguien más,
cuando en realidad sabías que no era así, que había algo más allá que nos
unía sin saber por qué, y eso me confundía, me sentía rara. por culpa de
esa rara sensación cuando estaba contigo. Aquella noche, de aquél día tan
raro, no pude parar de pensar en aquel momento, me costó dormir,
pensando en que tal vez era cosa de mi imaginación. Días más tarde,
después de varios días sin verte, se me quitó la confusión, te pregunté que
si era una apuesta, o un juego, pues no entendía como alguien como tú,
podía fijarse en alguien como yo, me diste un beso, a la vez que me dijiste
"¿piensas realmente que si fuera una apuesta o un juego haría esto?", me
sentía en las nubes, a la vez que caía sin más remedio de ellas por culpa de
mis pensamientos, de las dudas de por qué estaba ocurriendo aquello,
cuando las mejores cosas, los mejores momentos.. solo pasan, el problema
es las preguntas que nos hacemos, aquellas a las que les buscamos respuestas
sin saber que eso solo llega con el tiempo, que a veces es mejor no preguntarse
nada, simplemente, vivir el momento, dejarse llevar, y eso es lo que hago,
es lo que hago cada vez que estoy contigo, dejarme llevar por los momentos.
Gracias, gracias por aparecer, por darle un vuelco de 390º a mi vida, por ser
tú, y solamente tú, por estar aquí a mi lado, por aparecer de la nada, y
convertirte en todo, por esas cosas que solo tú y yo entendemos, y los demás
ni se imaginan, por esta gran experiencia en la vida, por dejarme quererte,
por hacerme sonreír tantas veces al día que ni te imaginas, por esos ratos a
tu lado, que hacen que todo esto merezca la pena, por hacerme ver que
después de todo lo malo, llega algo bueno, que cuando alguien se va, es para
que alguien mejor aparezca, como en este caso has aparecido tú, por hacerme
olvidar todo lo malo, y quedarme con lo bueno de los recuerdos que tengo y
tendré a tu lado, por esas cosas que no se pueden explicar con palabras, porque
son tan increíbles, que no habría forma de definir, como cuando tu sonrisa está
a tan solo 2 centímetros de mi boca, y ahí, ahí es cuando apuesto fuerte, por ti,
por mi, por esto, cuando me siento grande, grande a tu lado, a la vez que muy
pequeña, porque a tu lado.. todo se queda pequeño, y te lo he dicho ya varias
veces, a tu lado la palabra increíble, se queda corta. Espero que esto vaya
siempre a más, y nunca a menos, no puedo prometerte que siempre estaré en
tu vida, pero si que estaré el tiempo que me dejes, porque llevaba 16 años
sin buscar nada ni nadie, pero tú, tú has salido de la nada, y te has convertido
en todo lo que no buscaba, pero si en todo lo que quiero ahora aquí, conmigo,
durante mucho tiempo más, esto no era el texto que tenía pensado escribir,
pero si el que me ha salido sobre la marcha, tan solo pensando en ti, y no sé,
ya no sé que decir, solo quiero improvisar, como improviso cada momento
a tu lado, como cada tontería que improviso para sacarte una pequeña sonrisa.
.XI
Te conocí, tal vez en el peor momento, (aunque más
tarde la cosa cambiaría) no provocaste absolutamente
nada en mi, me olvidé de ti, no recordaba ni como eras.
Pasó el tiempo, y como si el destino quisiera que tú y
yo volviéramos a vernos, nos volvimos a encontrar,
cruzamos palabras, si eso alguna que otra mirada,
quedamos en que al día siguiente no sabrías quien
era yo, (un juego por así decirlo) sin saber por qué
te acordaste al verme.
2ª parte
Pasaron dos semanas o así, y quedé con unas amigas,
por casualidades de la vida una de ellas era amiga tuya,
la llamaste para verla, apareciste y empezamos a hablar,
no eras alguien que me llamara mucho la atención, más
bien en esa época estaba intentaba llamarle la atención
a un chaval, el cual estaba pillado, no sé por qué, pero
me transmitías confianza, me transmitías cosas que otras
personas no, era algo raro.
Pasaba el tiempo, y más confianza había, empecé a
plantearme eso de ganarte, no como si fueras un premio
(que también), sino ganarme tu confianza, tu cariño,
no sé si me explico. Cada vez que te veía pensaba en
cómo todavía había personas que rechazaban a alguien
como tú, alguien tan askchdhbca, y que tenía que conseguir
que te fijaras lo más mínimo en mi, era un tanto difícil, lo
veía casi imposible, (más que imposible, improbable) así
que tenía que saber cómo mover las fichas, cómo jugar,
como si fuera una partida de ajedrez, y si fallaba.. jaque mate,
como una partida de la oca, de oca en oca, y si gano beso tu
boca porque me toca. La cosa estaba difícil, y eso en realidad era
lo que me gustaba, que me costara, que hubiera algo que me
sacara de toda la mierda en la que pensaba continuamente,
porque en ese tiempo, lo estaba pasando mal, y lo único que
me hacia olvidar, era intentar llevarte a mi terreno.
3ª parte
Un día, después de varias semanas hablando, de risas, sonrisas, cruce
de miradas, hubo un cierto acercamiento, yo dudaba de mis movimientos
porque tú no eras coherente en ellos, me tratabas como alguien más,
cuando en realidad sabías que no era así, que había algo más allá que nos
unía sin saber por qué, y eso me confundía, me sentía rara. por culpa de
esa rara sensación cuando estaba contigo. Aquella noche, de aquél día tan
raro, no pude parar de pensar en aquel momento, me costó dormir,
pensando en que tal vez era cosa de mi imaginación. Días más tarde,
después de varios días sin verte, se me quitó la confusión, te pregunté que
si era una apuesta, o un juego, pues no entendía como alguien como tú,
podía fijarse en alguien como yo, me diste un beso, a la vez que me dijiste
"¿piensas realmente que si fuera una apuesta o un juego haría esto?", me
sentía en las nubes, a la vez que caía sin más remedio de ellas por culpa de
mis pensamientos, de las dudas de por qué estaba ocurriendo aquello,
cuando las mejores cosas, los mejores momentos.. solo pasan, el problema
es las preguntas que nos hacemos, aquellas a las que les buscamos respuestas
sin saber que eso solo llega con el tiempo, que a veces es mejor no preguntarse
nada, simplemente, vivir el momento, dejarse llevar, y eso es lo que hago,
es lo que hago cada vez que estoy contigo, dejarme llevar por los momentos.
Gracias, gracias por aparecer, por darle un vuelco de 390º a mi vida, por ser
tú, y solamente tú, por estar aquí a mi lado, por aparecer de la nada, y
convertirte en todo, por esas cosas que solo tú y yo entendemos, y los demás
ni se imaginan, por esta gran experiencia en la vida, por dejarme quererte,
por hacerme sonreír tantas veces al día que ni te imaginas, por esos ratos a
tu lado, que hacen que todo esto merezca la pena, por hacerme ver que
después de todo lo malo, llega algo bueno, que cuando alguien se va, es para
que alguien mejor aparezca, como en este caso has aparecido tú, por hacerme
olvidar todo lo malo, y quedarme con lo bueno de los recuerdos que tengo y
tendré a tu lado, por esas cosas que no se pueden explicar con palabras, porque
son tan increíbles, que no habría forma de definir, como cuando tu sonrisa está
a tan solo 2 centímetros de mi boca, y ahí, ahí es cuando apuesto fuerte, por ti,
por mi, por esto, cuando me siento grande, grande a tu lado, a la vez que muy
pequeña, porque a tu lado.. todo se queda pequeño, y te lo he dicho ya varias
veces, a tu lado la palabra increíble, se queda corta. Espero que esto vaya
siempre a más, y nunca a menos, no puedo prometerte que siempre estaré en
tu vida, pero si que estaré el tiempo que me dejes, porque llevaba 16 años
sin buscar nada ni nadie, pero tú, tú has salido de la nada, y te has convertido
en todo lo que no buscaba, pero si en todo lo que quiero ahora aquí, conmigo,
durante mucho tiempo más, esto no era el texto que tenía pensado escribir,
pero si el que me ha salido sobre la marcha, tan solo pensando en ti, y no sé,
ya no sé que decir, solo quiero improvisar, como improviso cada momento
a tu lado, como cada tontería que improviso para sacarte una pequeña sonrisa.
.XI