Un mundo imaginario lleno de sueños

 "Salvavidas", eso me viene a la cabeza cada vez que pienso en ti, que pienso en nosotras, no sé con qué derecho te crees a reiniciar mi vida como si yo no lo hubiera intentado más de mil veces, y todos los intentos fallidos, pero tú, vienes, me dices que quieres conocer el mundo  que me rodea, que quieres quererme, que me esperarás  todo lo que sea necesario, apareces , me miras, sonríes, te sientas a mi lado , en silencio, tratando de entender todo lo que callo, tratando de entender todo lo que me encadena, tratando de entender mi mundo, me dices que no tienes prisa, yo suspiro pensando en si aguantarás, me dices que me tranquilice que no te vas a mover de ahí, me siento, parece que me entendieras sin si quiera pronunciar palabra, parece que entendieras todos mis silencios, asiento, te miro, sonrío, sé que te quedarás.

 Apareces, apareces como quien nunca se fue, aunque en realidad, hace mucho, que no estás aquí, apareces en recuerdos de un viejo baúl, apareces a veces en sueños, y otras en la realidad a la que me enfrento desde que te fuiste, a veces juraría que nunca te marchaste, los recuerdos son tan fuertes, que te hacen estar presente en cada día, a veces porque me vienen a bocajarro, como un jarro de agua fría, -como si no doliera- y otras porque alguna amiga pronuncia tu nombre, o hacemos algún recordatorio de aquello que vivimos con tanta intensidad. Apareces, como si nunca hubieras dicho adiós, aunque en realidad, nunca lo pronunciaste, fue mucho más fácil salir corriendo sin mirar todo lo que dejabas atrás, sin pensar en las consecuencias, y sin dar si quiera una simple explicación, no te culpo, yo también hubiera huido, si no fuera por la simple razón, de que nunca tuve el suficiente valor a pesar de todo, de poder alejarme. -Apareces, y el mundo entero comienza a darme igual-